jueves, 13 de noviembre de 2008

Los juegos inolvidables de la época


Los juguetes en un chico siempre dejan huellas, aunque sean humildes como una pelota hecha con una media y papel.
Entre los 60 y los 70 pasaron juguetes que hoy son emblemáticos y entrañables. El juego de la Oca, el Ludo, la lotería, las cartas, los dados, la pelota pulpo, las figuritas pegadas con engrudo (harina y agua). Nada de ¨Compu¨todo a fricción, cuerda o pila. Tambén a tracción a sangre como la ¨Bici¨o el triciclo o el carrito con rulemanes y porque no un barrilete con su vuelo lleno de imaginación y esperanza a un mundo mejor, a otro planeta.Viví una Argentina que siendo de una familia humilde nunca me falto el juguete y el afecto del que me lo regalo. Era un terrible ¨inchapelotas a la hora de salir con mi mamá, mis tias y mi abuela, siempre pidiendo un juguete o un regalito, y después de joder incansablemente llegaba el paquete de figuritas de fútbol, los soldaditos para el fuerte o un cochecito...Un malcriado hijo único, jaajaja
Uno de los recuerdos mas lindos que tengo es de Noche Buena, me habián prometido, el Batimóvil, marca gorgo a fricción y esa noche llegaría personalmente Papa Noél, que ansiedad Dios! no cabía en mi, pero al fin las 12 llegó y primero se escucho unos cascabeles del trineo, luego miro hacia arriba que estaba la terraza de la calle Enrique Ochoa 145, y casi sin aire veo sorprendido el brazo de Papa Noel tirando la bolsa con regalos, (temblaba de alegría!) cayó en el piso del patio me acerqué corriendo y entre otros regalos apareció el preciado Batimóvil. Ese recuerdo imborrable se lo debo a mi querido tío Néstor. Al pasar los años continué la tradición haciendo yo de papa Noel para mis hijos.


En la foto estoy sobre mi querido Karting rojo marca Brodway, hermoso! Más tarde al dejarlo estacionado bajo el cordón de la calle Enrique Ochoa cortada por el terraplén, un coche hizo marcha atrás y lo dejó hecho un bandoneón, yo me salve y mis tíos lo arregalron llevandolo a un chapista
Continuará...